viernes, 23 de enero de 2015

Antonio Ribera y la ufología negrolegendaria

Estoy leyendo Cartas de tres herejes, una edición de la correspondencia entre los ufólogos Antonio Ribera, Jacques Vallée y Aime Michel. El libro contiene notas de Javier Sierra.

En una carta de 1966 Ribera se lamenta a Michel presuntamente por incumplir la promesa de publicar un artículo sobre su obra en la revista francesa Planète:
Siendo catalán, tengo vocación europea. Mi mirada está puesta en Europa y no en esta España trágica y sombría de raíces africanas. Roma y Grecia pesan aún en nosotros, desde mucho antes que el Islam.  
Antoni Ribera i Jordá
En su respuesta Michel se muestra comprensivo con los delirios nordicistas de Ribera, típicos del nacionalismo español periférico, aunque también alude a su particular cárcel nacional francesa. Ambos ufólogos parecen sufrir cierto "complejo de Galileo", que Ribera juntaba con aires de español represaliado ("Como catalán estoy acostumbrado a la omisión y al silencio"). Efectivamente Ribera provenía de una familia republicana, desarrolló algunas actividades políticamente contestatarias, según el perfil de Wikipedia "fue detenido por unos ideas" y llegó a ser amenazado de muerte, según su confesión a Fernando Jiménez del Oso.

Pero a fin de cuentas nada de esto evitó que Ribera publicara el grueso de su obra durante el mismo "franquismo". Fuera de España, desde luego debido a su talento y manejo de los idiomas, Ribera dio conferencias en toda Europa, publicó artículos en la Flying Saucer Review y llegó a intervenir en la cámara de los lores inglesa, en 1977. Por más que pusiera su mirada en Europa, sin embargo, donde vendió realmente libros Antonio Ribera, más de 50, fue en España, la inmensa mayoría escritos en español común y -en honor a la verdad- con un estilo cultural apreciable, nunca alcanzado por otro ufólogo español.

Resulta sorprendente que, pese a nacer tan cerca de un país africano, Ribera sea uno de los autores mundiales con más libros publicados sobre ufología.